Ingeniero en Industrias Agrarias y Alimentarias y licenciado en Enología por la Universidad Rovira i Virgili. En 2005, se incorporó a Familia Torres para iniciar, junto a Mireia Torres, el proyecto vitivinícola en la DOQ Priorat. Desde entonces, es el enólogo y gestor de esta bodega.
Hoy Jordi, como enólogo de raza, conoce al detalle la evolución de los vinos del Priorat; consciente de que el viejo legado experiencial para con la viticultura en la comarca apuntala y cimenta una nueva vanguardia enológica que alumbra elaboraciones expresivas e identitarias:
“La viticultura en el Priorat tiene una historia milenaria. Desde inicios del siglo XX, los vinos de la región han sido reconocidos por ser tintos muy valorados por su intensidad de color, por su corpulencia y por ser muy robustos”.
Con Familia Torres como estandarte, Jordi asume con gusto la responsabilidad que conlleva semejante rol. “A nivel personal, gestionar la bodega de Familia Torres es un orgullo y una gran responsabilidad. Nuestro reto es elaborar los mejores vinos que el viñedo puede ofrecer, añada tras añada”.